Adolescentes
La adolescencia es una etapa vital que se encuentra entre la niñez y la etapa adulta, por lo que las personas se encuentran en un período vital lleno de incertidumbre. No hablamos de adultos, tampoco de los 'peques' de la casa, sino de personas que se encuentran en un momento crucial de sus vidas, en el que no solamente han de decidir qué hacer en el futuro, sino también conocer qué quieres y qué opciones tienen para ello. Es el deber del adulto proteger a nuestros adolescentes para prevenir posibles problemas psicológicos, tanto a corto como a largo plazo, que deriven en sintomatologías más severas y prolongadas.
Toma de decisiones
Los adolescentes se encuentran en una etapa crucial, asediados por los estudios académicos y la toma de decisiones acerca de su futuro (laboral o estudiantil), así como en algo tan importante como sus primeros inicios en relaciones afectivo-sexuales. A pesar de la ayuda que se recibe por parte de los progenitores, muchos adolescentes se encuentran indecisos sobre los pasos a seguir para comunicar información a las familias, realizar preguntas concretas sin miedo al juicio externo o incluso la toma de decisiones vitales que modificarán su vida una vez tomadas (como el traslado a otro país distinto del país de origen).
Adicciones
En ocasiones y debido a influencias sociales, las personas adolescentes refuerzan sistemáticamente determinadas conductas (como la ingesta de alcohol, porros y otras drogas). Su ambiente social se encuentra dominado por la importancia de la búsqueda de aprobación de sus iguales, por lo que muchas veces el origen del problema de adicción se centra en el reforzamiento de tales conductas dentro del ambiente social del adolescente (siendo desconocido por el entorno familiar) así como en la mala gestión de sus emociones.
Riesgo de suicidio y otros problemas psicológicos
En la adolescencia se inicia un período de fomento y promoción de la independencia respecto del entorno familiar, centrándose en el apoyo de sus iguales y en el inicio de las primeras relaciones románticas, incluyendo el contacto con el sexo. A veces la comunicación con la familia es escasa o ausente, propiciando estados depresivos (o no), intentos de automutilación o ideación suicida. En este sentido, muchos adolescentes y sus familias precisan de psicoeducación y orientación profesional sobre herramientas de actuación ante situaciones como el manejo de la ira, la mejora de la comunicación en la familia, estrategias para disminuir la ansiedad o el aprendizaje de habilidades sociales. No hay que olvidar también otros problemas resaltables, como los estados ansioso-depresivos, el riesgo de suicidio ya mencionado o el aislamiento social (entre otros factores reseñables).
El profesional experto en psicoterapia con adolescentes
La solución por excelencia ante las complicaciones anteriores es el profesional experto en psicoterapia adolescente, una persona que, desde la objetividad, trabaja con el/la adolescente para profundizar en sus miedos, emociones y dudas referentes a la etapa vital en la que se encuentra y el futuro que está por venir. El psicoterapeuta también trabaja con el ámbito familiar, propiciando climas adecuados donde el/la adolescente pueda expresarse con claridad, respecto y seguridad, recibiendo un feedback adecuado y adaptado a sus características personales y circunstancias particulares, todo ello desde la profesionalidad.
Responsable del área: Guillermo Remacha
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